Están los que creen en la suerte, están los que creen que por milagro divino las cosas vienen, están los que le viene regalado y estamos los que pensamos que un poco de todo, sumado a una forma de ser, pensar y trabajar muy duro, y siendo fiel a tus principios. Ellos son de las parejas que están aquí, en este blog, en mi recuerdo, en la retina como si hubiera sido aun ayer, precisamente por eso.

La suerte en realidad ha sido conocerlos, a ellos en concreto en esta ocasión, pero quienes sepan de que va la historia, y estén en el ajo, sabed que también va por vosotros. Pero vamos a su día, voy a centrarme: Leixuri y Mauri.

Comienza el sábado, su sábado. Su día. Desayuno junto a mi amigo y compañero Alvaro Santos ya que ese día volvíamos a trabajar juntos y nos dirigimos al hotel Ercilla en pleno corazón de Bilbao donde Mauri nos esperaba, junto con la mayoría de su familia…son las 9 de la mañana, pero el día ya ha empezado, arranca su boda. Ese día nos lleva momentos después con nuestra preciosa novia de ese día y después directos a Lemoiz, un pueblo en la costa Bizkaina donde ya nos reunimos con mis limonas, Marketing for Lemons, las encargadas de que todo fuera rodado, primero en la Ermita de Andra Mari y después en el Club Hípico Goikomendi disfrutaríamos de un día no solo fabuloso, sino rodeados de gente maravillosa. En serio chicos, vuestras familias, vuestros amigos, ese fervor, esa fiesta, eso…¡eso es una boda! Vuestro día es la descripción de una boda pura, una boda de verdad, una boda con sus horarios y sus tradiciones, pero una boda 100% personal. La fuerza con la que se vivía todo, la espontaneidad, el cariño de los mas de 200 invitados allí congregados, las ganas, de verdad… Todos los que estuvimos en esa boda trabajando, tuvimos “un poco menos de trabajo” al sentirnos rodeados de la perfección en lo que buscamos hacer. Una boda especial, cuidada, pero sobre todo, activa. Mas que activa, hiper-activa. Del mas joven al mas adulto, cada una de las personas que estuvieron con vosotros ese día son de 10.

El resumen que hago aquí, y vosotros lo sabéis, no es mas que una pequeña muestra de lo vivido, pero creo que como resumen de vuestra historia, deja ver claramente de lo que hablo en el párrafo de arriba. La fuerza, la fuerza y alegría de vuestro día. No solo la vuestra, que es el nucleo que mueve una boda, sino del conjunto de los que allí congregados en el Club Hípico Goikomendi hicieron de vuestra boda…lo que yo entiendo como forma de vida: familia+amigos+alegría.

Ya lo hemos hablado en privado, y las gracias os las tengo que dar yo a vosotros, así que dejad que cierre este pequeño texto con algo ya habitual, pero personal de corazón a cada una de las parejas a la que va dirigida.

Lei, Mau… Gracias por dejarme estar ahí, con vosotros, ese día.

Tremendamente honrado, profundamente agradecido.

Dale al play!

LEIRE + JON | BODA EN CASERIO OLAGORTA

Prev

INES + ENDIKA | BODA EN EL MONASTERIO DEL ESPINO (BURGOS)

Next