Aun era de noche cuando llegué a su casa, puede ser por el echo de que fuera en pleno Diciembre…
Mi última boda de la temporada 2016 tenía que ser una boda de gris plomizo y verde intenso…y…¡Ni hecho a drede! Nos acompaño un sol veraniego (que no consiguió aplacar el gélido día de montaña Gipuzkoana) aunque como la idea de su boda, aunque fuera religiosa, no era una boda “ordenada como tal” nos permitió explotar la preciosa combinación de luz que se forma entre un sol de justicia y la niebla cerrada de la zona donde viven los dos protagonistas del día.
Comenzamos como debe empezarse un día así: con tranquilidad. Nada mas llegar a su casa los anfitriones nos recibieron tanto a Erika (la encargada del M.U.A.H. de la novia) como a mi con un buen café, y después todo fue lo que debería ser…nervios, que siempre existen, pero con un concepto de día muy SLOW. Se prepararon, íbamos con tiempo de sobra, quisieron estar ellos solos, acompañados exclusivamente de una amiga, tuvimos un “First look” en su propia casa y nos fuimos a hacer la parte de la “mini sesión de pareja” antes tan siquiera de emprender el camino a la Ermita de la Antigua en Zumarraga, donde se darían el si quiero.
De allí, camino al restaurante Boroa (Boroa Jatetxea) en Amorebieta y a disfrutar de un cocktail en los jardines para pasar después a disfrutar de la afamada gastronomía del lugar y sin darnos cuenta, se fue la luz, con una increíble puesta de sol y llegó el momento de la ¡¡¡Fiesta!!! …
En definitiva, una boda perfectamente planificada para ser tranquila, a la par que emotiva, lo que ellos me confesaron que querían desde un principio. Desde aquí solo puedo tener buenas palabras para agradecerles lo bien que me lo pasé en su día rodeado de gente super-educada y super-maja, millones de risas, y unos novios que me dieron todas las facilidades del mundo para poder hacer un trabajo cuidado al detalle, que querían un estilo fotográfico sencillo y natural, pero preocupados muy mucho también por la parte mas “artística” de la fotografía.
¡No me enrollo mas!
Miren, Egoitz, gracias por confiarme un día así, de todo corazón os digo: Honrado y agradecido.
Que hablen las fotografías, dale al play!!!
VESTIDO: Teresa Helbig
ZAPATOS: Serena Whitehaven
TRAJE: Huggo Boss
M.U.A.H.: Erika Galea Estilistas
RESTAURANTE: Boroa Jatetxea Amorebieta
RAMO: Flowers & co